ALMA DE POETA

tenían engañados, la policía era la misma. No nos dejaron vender nuestros libros, otros poetas "sin compromiso" tenían todos los permisos.

La primera función del poeta y su poesía es arrojar luz sobre los estallidos de los acontecimientos y dar sentido a las cuestiones insólitas. En todas las sociedades, por contra de lo establecido, surge el que, convencido de sus ideas, lucha en solitario contra viento y marea, contra todo tipo de autoridad represiva y coercitiva, y en este caso, nuestro autor, José Luis Molina, también su pareja de vida, Marisa Ávila, luchan con el arma más contundente: luchan con la palabra.

Dar luz con la palabra, primer paso hacia el progreso. La palabra poética es un viento que transita lugares pretendiendo alcanzar el corazón de la gente, el poeta es la voz para despertar conciencias, la poesía se enaltece en la naturaleza y la naturaleza es el OM cósmico de la palabra: al principio fue el Verbo.

Un poemario que, desde las voces de sus autores, invita al lector a ser partícipe de esta palabra poética expandida en el tiempo, Alma de Poeta: La vida en la memoria, donde lo cotidiano es plasmado en versos, entre la frontera de la añoranza por los años transcurridos y la sonriente complacencia de la verdad actual

José Luis Molina García, (Almería, 1950). Siempre fue un niño rebelde y sufrió mucho en la escuela por culpa de la famosa frase, "La letra con sangre entra". Lo acribillaron a palos los maestros.
Marisa Ávila, (Almería, 1959). Autora del Libro "Los cuentos que no me contaron" con dos ediciones de 2000 ejemplares y los agotó en dos años. Primer Premio de Poesía de Roquetas de Mar con el poema: "Ella".
Prólogo de Alonso de Molina.